Esta máquina utiliza ultrasonido enfocado de alta intensidad (Ultrasonidos focalizados de alta intensidad) para destruir de forma permanente los tejidos adiposos subcutáneos en el interior y costados del abdomen. El sensor, contenido dentro del cartucho de tratamiento reemplazable (RTC), enfoca la energía a una profundidad específica, creando un aumento rápido de la temperatura local en la zona afectada. Ultrasonidos focalizados de alta intensidad se basa en el hecho de que, por encima de un umbral de 56℃ (para >1 segundo), se produce la muerte celular irreversible. El sistema ofrece una entrega de energía focalizada y precisa que no causa daño a la piel, tejidos u órganos circundantes.