La secadora para laboratorio de ciclo cerrado es ideal para el secado de materiales que contienen solventes combustibles o que liberan gases tóxicos durante el secado. Es ideal para materiales que son bastante sensibles a las temperaturas del secado ya que pueden conducir el secado de baja temperatura por debajo de los 100 ℃. Este tipo de secadora para laboratorio emplea una estructura de ciclo cerrado. También emplea gas inerte como el medio de secado para que el proceso pueda ser más seguro.